¿De qué murió Diego Rivera?

¿De qué murió Diego Rivera?

En el marco del día de muertos, rendimos homenaje al famoso pintor Diego Rivera, cuyo nombre completo era Diego María de la Concepción Juan Nepomuceno Estanislao de la Rivera y Barrientos Acosta y Rodríguez. Nació el 8 de diciembre de 1886 en Guanajuato. Tan sólo con diez años de edad ingresó a la Academia de San Carlos. En 1907, después de su primera exposición individual, recibió una beca para estudiar en España y al año siguiente se instaló en París. Entre 1913 y 1917 realizó un importante número de obras cubistas. Cuatro años después realizó un viaje a Italia donde aprendió técnicas que le darían mayor énfasis a su propio estilo, en el mismo año volvió a México por segunda vez y colaboró para promover e impulsar las riquezas culturales de México.

Durante 1922 realizó su primer mural en el interior del Anfiteatro Bolívar de la Escuela Nacional Preparatoria, uno de los recintos de espectáculos más importantes de México. A partir de entonces, Diego Rivera creó diversos murales en México y en Estados Unidos, como El hombre de la encrucijada en 1933 para el edificio Rockefeller Center de Nueva York, mismo que fue censurado y destruido por pintar en él un retrato de Lenin.

Después de dos divorcios, en 1929 contrajo matrimonio con la famosa pintora Frida Kahlo, quien falleció en 1954, al siguiente año le diagnosticaron cáncer a Diego Rivera y finalmente falleció el 24 de noviembre de 1957 por una insuficiencia cardíaca, pero…

¿Qué es la insuficiencia cardíaca?

Se da cuando el corazón no es capaz de cumplir eficazmente con la función de bombear la sangre a todo el organismo para proveer los nutrientes que necesitan los órganos del cuerpo. Se origina cuando hay daño por alguna circunstancia propia o externa del corazón.

De entre muchas causas, estas son las más frecuentes:

  • Hipertensión
  • Arritmia
  • Obstrucción de las arterias del corazón (infarto)
  • El consumo de algunos fármacos
  • Algún virus
  • Radiación y quimioterapia
  • Enfermedades pulmonares
  • Enfermedades autoinmunes
  • Nacimiento con problemas en las válvulas cardíacas
  • Problemas estructurales del corazón

En gran parte se relaciona con el infarto porque hay una pérdida del balance en el consumo y aporte de oxígeno del corazón, ya que este sucede cuando las arterias del corazón se tapan por colesterol, diabetes o ácido úrico.

El síntoma más común es la sensación de la falta de aire, o también llamada disnea, que en las etapas iniciales se manifiesta al hacer esfuerzos como correr, subir escaleras o caminar. La enfermedad va progresando y en etapas avanzadas, los pacientes presentan la falta de aire con sencillas actividades cotidianas como el vestirse, bañarse o incluso comer. Otros signos asociados puede ser hinchazón de piernas y cara, ruidos anormales en los pulmones al momento de respirar por la presencia de líquido en ellos, el crecimiento del hígado y la dilatación de las venas del cuello.

Esta enfermedad puede generar incapacidad para trabajar ya que ocasiona una enorme cantidad de consecuencias a distintos órganos del cuerpo como el riñón, los pulmones y el cerebro, hasta provocar la muerte.

Cuando la insuficiencia cardíaca es secundaria a otra enfermedad, por ejemplo, algún proceso obstructivo, el paciente puede mejorar, incluso sanar si se retira el factor desencadenante; lo mismo ocurre cuando el problema es a nivel válvulas cardiacas, pues remplazándolas el problema se resuelve.

Para diagnosticar esta enfermedad es necesaria una serie de estudios clínicos o de imagen e intervención médica, incluido el uso de cateterismo cardiaco. Una vez que se diagnostica la insuficiencia cardiaca, el tratamiento debe ser integral y dependerá mucho de encontrar la causa específica que la origina en el paciente para determinar el tratamiento más adecuado. Estos pacientes requieren de un seguimiento continuo y de la prevención de otras enfermedades metabólicas o respiratorias. Las etapas avanzadas de esta enfermedad demandan tratamientos intrahospitalarios y más complejos.

En el mundo occidental, 1 de cada 6 pacientes de más de 65 años que están en urgencias tiene insuficiencia cardiaca y es una de las primeras causas de hospitalización en personas mayores.

 

Con información del Dr. Álvaro Conteras Villaseñor, Médico adscrito de Hemodinamia del Centro Médico Siglo XXI y Docente de posgrado de la Facultad de Medicina, UNAM, dr.alvarocontreras@gmail.com

¿Qué es la osteoporosis?

 

Esta enfermedad se puede definir como una reducción de la masa en los huesos, lo que los hace porosos y modifica su arquitectura normal, generando la pérdida de fuerza y resistencia e incrementando el riesgo de fracturas.

La mayoría de las personas que tienen osteoporosis no saben que la padecen hasta que presentan una fractura, por lo se podría decir que no hay signos o síntomas indicativos de la enfermedad, ocasionando que en la mayoría de los casos se diagnostique cuando el hueso ya está muy dañado. Las fracturas más comunes son de la columna vertebral, la cadera y la mano.

Los factores de riesgo los podemos dividir en dos:

  1. No modificables son los genéticos como ser mujer, edad avanzada, raza blanca y condiciones fisiológicas como la menopausia, el embarazo y la lactancia.
  2. Factores modificables y de más alto riesgo son fumar y beber alcohol en exceso, obesidad, bajo consumo de calcio, nula o escasa actividad física y el sedentarismo.

Existen enfermedades y medicamentos que pueden acelerar el riesgo de padecer osteoporosis, como lo son las enfermedades endocrinológicas, donde hay alteraciones hormonales o enfermedades reumatológicas, que pueden provocar osteoporosis, como es el caso de la artritis reumatoide.

Actualmente existen estudios para poder medir la cantidad de masa ósea, denominados densitometría ósea, así como algunos exámenes de laboratorio para ver cómo se encuentra el calcio, el fósforo, el magnesio,  las hormonas paratiroidea y paratohormona, que intervienen en el proceso normal de formación de huesos.

Nuestro cuerpo sólo necesita un gramo de calcio al día para mantener en buen estado nuestros huesos. En dado caso que ya se padezca la enfermedad el tratamiento dependerá de la causa que este provocando éste problema en los huesos como puede ser modificación en el estilo de vida, hacer ejercicio, tener una dieta con alimentos ricos en calcio como los lácteos, leche, yogurt, queso, mantequilla, nueces, almendras. En en caso de ser necesario el médico puede recetar medicamentos para suplir estas deficiencias y frenar el daño al hueso.

 

Con información del Dr. José Halabe Cherem, jefe de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina de la UNAM.

Cáncer de mama

 

El cáncer de mama se define como un crecimiento rápido, anormal y sin límite de las células del tejido mamario, es la primera causa de mortalidad en mujeres a nivel mundial, pero tiene el 93% de probabilidades de curarse si se diagnostica en etapa temprana. A pesar de que la posibilidad de padecerlo comienza, en promedio, a partir de los 20 años y aumenta considerablemente hacia los 40 años, se han dado algunos casos en niñas o adolescentes mayores de 10 años.

Es de suma importancia que una mujer comience a realizarse la autoexploración mensual, siete días después de cada menstruación a partir de los 20 años de edad y acuda periódicamente a realizarse la mastografía a partir de los 40. Los signos de alerta son: sentir bolitas duras y no móviles en las mamas, piel inflamada o rojiza, poros abiertos, pezón retraído o alguna secreción fuera del periodo de lactancia. Es recomendable evitar un elevado consumo de alimentos procesados y grasas, así como de alcohol y tabaco; se debe aumentar el consumo de vegetales y frutas naturales, y realizar ejercicio físico.

 

Con Información de:

 

  • Elías Yused Argüello Esparza, Subdirector de Cáncer de Mama en el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva.
  • Gilberto Nicolás Solorza Luna. del Subcomité Académico de Oncología Médica de la División de Estudios de Posgrado, UNAM