El 6 de febrero ha sido designado por la ONU como el día mundial de la Cero Tolerancia contra la Mutilación Genital Femenina, práctica que aún sucede con frecuencia en varios países del norte de África y con mucha menor frecuencia en algunos del Medio Oriente, con la finalidad de controlar la sexualidad femenina, asegurar el matrimonio y evitar las infidelidades. Física y psicológicamente, esta práctica trae muchos riesgos para la salud de las mujeres como dolor extremo, hemorragias, quistes, fístulas, estado de shock, depresión, ansiedad y estrés postraumático.
Con información de la Dra. Luz María Ángela Moreno Tetlacuilo, Coordinadora del programa de Estudios de Género y Salud, profesora asociada del Departamento de Salud Pública.