¿Alguna vez sentiste que se te zafó la rodilla o el hombro? Puede ser que te hayas luxado.

 Una luxación es el desplazamiento de los huesos que forman una articulación, lo que causa una pérdida de congruencia articular. Se produce por accidentes, como caer sobre alguna extremidad extendida o hacer deporte, o por debilidad del tejido conjuntivo y de sostén.

Debido a la lesión puede haber diversas estructuras afectadas, como ligamentos, cápsula articular, vasos sanguíneos y nervios. La luxación puede ser de dos tipos:

Luxación simple: Es aquella en la cual no existe asociada una fractura, el tratamiento es conservador, con un periodo de inmovilización de 3-4 semanas.

Luxación Compleja: Asociada a fractura. El tratamiento suele ser necesaria una intervención quirúrgica en el cual el tiempo de cicatrización es más largo. El tratamiento dependerá de la localización de la luxación por lo cual en la valoración detallada aparecen síntomas de dolor, hematoma, inflamación y pérdida funcional, además de la incongruencia evidente de los componentes de la articulación. La luxación glenohumeral (hombro) es la luxación más frecuente en extremidad superior debido a caídas sobre el brazo extendido.

El tratamiento dependerá de la localización de la luxación. Puede ir desde una intervención quirúrgica hasta ejercicios fisioterapéuticos que buscan reducir e inmovilizar la zona para lograr la congruencia articular adecuada, disminuir y controlar el dolor, o mantener la amplitud de movimiento de las articulaciones no implicadas.

Los objetivos principales del tratamiento son:

Reducir e inmovilizar para lograr la congruencia articular adecuada.

Mantener una posición correcta de la articulación en la fase de inmovilización para evitar deformidades.

Disminuir y prevenir edema.

Disminución y control de dolor.

Evitar o retrasar la pérdida de masa muscular a través de ejercicio.

Mantener la amplitud de movimiento de las articulaciones no implicadas.

Mantener la sensibilidad propioceptiva ya que debido a la fase de inmovilización los receptores articulares, cutáneos y musculotendinosos reciben menos estímulos.

Evitar complicaciones como la rigidez articular.

 

FUENTES: Seco, J. (2016). Fisioterapia en Especialidades Clínicas. España: Panamericana. Hans-Anton A. (2008). Medicina de Urgencias. Madrid, España: Panamericana. Márquez, P. (2017). Luxación de codo. 12 Noviembre 2018, de ELSEVIER

Colaboración de las Pasantes de la LFT: Claudia Ivonne García Dávila y Paola García González

Revisado por el LTF Yosimar Cruz Flores