Día de la lucha contra la homofobia

Día de la lucha contra la homofobia

 

 

Es el rechazo, señalamiento, pensamiento negativo y odio hacia todas las personas que no son heterosexuales y trasgreden el sistema de género. Mismo que surge de la idea de que el hombre con estándares masculinizados es el centro y la figura máxima en la sociedad.

Como antecedentes tiene el día de la intolerancia y el 17 de mayo se conmemora el Día Internacional contra la homofobia, retomando el día en que la OMS retiró a la homosexualidad de su lista de enfermedades mentales. Actualmente se han agregado los términos “lesbofobia”, “bifobia” y “transfobia”, para visibilizar a todos los grupos de la comunidad LGBT.

La identidad de género se refiere al cómo se autoidentifica una persona, como hombre o como mujer, independientemente de su sexo biológico y orientación sexual, mientras que ésta última es la atracción erótica y afectiva que se tiene por otras personas, ya sean del mismo sexo, sexo opuesto o ambos.

 

Los dos principales tipos de homofobia:

Sutil: Es el hecho de no agredir u ofender a una persona LGBT y supuestamente, aceptar su orientación sexual mientras no lo demuestre o exprese libremente.

Directa: Es la presencia literal y evidente de agresión física o verbal, violencia, rechazo, privación de los derechos humanos e incluso de la vida de la persona afectada.

 

Las personas Trans son las mayormente afectadas, sobre todo con homofobia directa, son victimas de agresión y violencia. Cualquier tipo de homofobia tiene impacto en la salud mental del afectado, generando depresión e incluso ideación o intento suicida.

Según el CONAPRED, el 60% de la comunidad LGBT se ha sentido discriminada en el último año versus el 20% de la población general sin importar su orientación sexual. El 83% sufre de violencia sutil por ser aludidos con chistes ofensivos entre las pláticas cotidianas; y el 53% sufre de violencia y agresión física.

El 77% de las personas Trans se han sentido discriminadas o incómodas en las consultas médicas ya que los médicos insisten en llamarlos y tratarlos de acuerdo a su sexo biológico y no por su identidad de género.

La comunidad LGBT ha sentido la necesidad de ocultar su orientación sexual en consulta médica, lo que significa una barrera de comunicación para sus tratamientos o métodos de prevención en salud sexual. Esto resta la efectividad para evitar infecciones, principalmente de transmisión sexual o aquellas que requieren del uso de hormonas en el caso de la población transexual.

 

 

Con información del Dr. Juan Carlos Mendoza Pérez, Académico del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina, UNAM.

 

Salud y Seguridad en el Trabajo

Salud y Seguridad en el Trabajo

 

El Día Internacional de la Salud y Seguridad en el Trabajo tiene como antecedente el tratado de Versalles al firmarse la paz de la primera guerra mundial y firman los principios de la Organización Mundial del Trabajo en 1919, por lo que este año se celebró el centenario de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), siendo la más antigua de las Organizaciones Unidas.

Posteriormente, en 1996 se indicó el 28 de abril como Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, en memoria de los trabajadores fallecidos por heridas y accidentes por el ambiente de trabajo.

En 2003, a petición del movimiento sindical, la OIT retoma la misma fecha y se crea el día internacional de la salud y seguridad en el trabajo.

La OIT crea convenios y recomendaciones internacionales en función de los derechos laborales, uno de sus propósitos es promover la importancia de la seguridad y la salud a través de la prevención de los accidentes y enfermedades del trabajo. También busca pronover el trabajo decente y productivo en condiciones de igualdad y dignidad tanto para hombres como para mujeres, con sueldos dignos y seguridad social.

Todos los accidentes y las enfermedades de trabajo son prevenibles.

Factores de Riesgo:

  • Estrés
  • Radiación
  • Alto nivel de ruido
  • Fugas
  • Pesticidas
  • Exposición a animales ponzoñosos
  • Radiación UV
  • Posiciones no ergonómicas que afectan el sistema musculo esquelético
  • Exposición a sustancias toxicas: polvos, gases, humos, vapores, pesticidas, materiales pesados, disolventes cancerígenos

El único responsable de los problemas de salud que lleguen a sufrir los trabajadores es el patrón o empleador y tiene la obligación de llevar a cabo acciones de prevención.

Al año ocurren 317 millones de accidentes y 160  millones de enfermedades de trabajo anuales.

2 millones 300 mil personas mueren por accidente o enfermedad de trabajo. Las principales causas son:

  1. Enfermedades del sistema cardiocirculatorio 31%
  2. Cáncer de origen profesional 26%
  3. Enfermedades respiratorias 17%

 

Con información del Dr. Rodolfo Nava Hernández, Coordinador de Salud en el Trabajo de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina, UNAM.

Medicina Maya

Medicina Maya

Los médicos mayas tenían una formación desde la infancia, y se decía que una deidad escogía a los elegidos, visitándolos en sueños durante la niñez o la juventud. Recibían por medios naturales los cristales que indicaban la profesión y los guiaban por resplandores blancos, azules, verdes o rosas. Si un médico moría, el cristal buscaba a quién lo reemplazaría.

Se preparaban desde casa y estaba ligado a los lenguajes secretos y esoterismo. Accedían a otra dimensión por medio de alucinógenos para suplicar a los dioses por su paciente, pero corría el riesgo de quedarse atrapado, perder sus facultades mentales o imposibilitado para recuperar su personalidad.

En algunas ocaciones, el sobrevivir al golpe de un rayo indicaba que esa persona quedaba marcada con poderes sobrenaturales y debía ser médico.

Los mayas yucatecos creían en la existencia de un órgano especial y único llamado tip té, de tamaño pequeño y situado bajo el ombligo, cuya función era la de regular la actividad de las otras partes del organismo. De allí partían las venas hacia las partes superior e inferior del cuerpo y empujaba la sangre a todos los órganos. Su nombre se debe los latidos que emitía. Tipp té significa “dolor de tripas o de vientre, de ventosidad, que fatiga mucho con latidos que (da) en medio”.

Si este órgano se desplaza de su lugar, la persona pierde el equilibrio y se desajusta, entonces la persona enfermaba, sufría vómitos, diarreas y dolor abdominal, hasta que el tip té se restablecía por medio de masajes.

Las enfermedades se debían a fuerzas externas que cometían afectaciones al cuerpo humano. Se decía que el paciente provocaba sus padecimientos por pecado, excesos e intromisión a los sitios “peligrosos” donde moraban seres sobrenaturales, por actos antisociales, haber generado envidia o estar próximo a seres humanos nocivos o que transgredieran las normas sociales. También sufría el ataque directo de factores agresores como ciertos dioses, objetos con carga divina, muertos de soles anteriores, gobernantes, sacerdotes o hechiceros.

Fuente:

Treviño, Carlos Viesca. 2007. Historia de la Medicina en México. Departamento de Historia y Filosofía de la Medicina, Facultad de Medicina, México: Universidad Nacional Autónoma de México, pp. 35 – 49.

Enfermedades en el mundo maya

Enfermedades en el mundo maya

Las enfermedades mayas estaban directamente relacionadas con dioses y fuerzas de los seres del inframundo que vivían en medio de la oscuridad y la humedad, ávidos de calor y capaces de devorar el alma de los hombres incautos. Generaban padecimientos fríos, como los vientos nocturnos, el aire que provenía de los cadáveres y las enfermedades relacionadas con el agua.

  • Xiquiripat y Cuchumaquic causan derrames de sangre. 
  • Analpuh y Ahal-ganá hinchaban a los hombres, les teñían el rostro de amarillo y hacían brotar pus de sus piernas. 
  • Chamiabac y Chamiaholom eran los señores que enflaquecían a los hombres hasta volverlos huesos y calaveras. 
  • Ahalmez y Ahaltocab enviaban desgracias sobre los hombres, de manera que éstos eran encontrados tirados en el suelo, heridos y muertos. 
  • Xic y Patán causaban la muerte repentina de los hombres en los caminos, haciéndoles vomitar sangre hasta morir. 

Según el Popol Vuh, el inframundo se llama Xibalbaen lengua quiché. Lugar en el que existían dioses y jueces supremos: 

Estos datos refieren cierto tipo de enfermedades y padecimientos que parecían ser frecuentes como diarreas y vómitos de sangre, infecciones del hígado, disfunción del corazón, de los riñones y consunción por distintas infecciones. 

En el Ritual de los Bacabes, conservado y recogido dentro del ámbito privado y doméstico de la actuación de los médicos tradicionales mayas, se percibía a la enfermedad como un ente que tenía un origen, progenitores y una casa, que había nacido en un temazcallien el que había permanecido cuatro días antes de comenzar su movimiento, que poseía símbolos, características y joyas como anillos, rosario, peine e hilos de oro. 

También, las enfermedades estaban vinculadas a algunos animales: de la piel con las arañas, avispas y termitas, armadillos y monos; mientras que los espasmos, desfallecimientos y entumecimientos se relacionaban con el mono, jaguar, venado, iguanas, tarántulas y avispas. 

Los mayas poseían una clasificación de las enfermedades:

Kakera calor o fuego y abarcaba las erupciones de la piel, granos, pústulas y tumores, su responsable era la luna. 

Kinich Kakmoera una deidad solar que causaba padecimientos relacionados con el calor, fiebres, epidemias y posiblemente males de la piel.

Las enfermedades tancás, “ataque” o “frenesí”, eran los espasmos, la locura y los desfallecimientos. 

Otro grupo estaba relacionado con el inframundo y el agua: los dioses patronos del agua, el aire y la lluvia, como Itzam Na y sus ayudantes,chacespahuatunes, causaban males respiratorios como insuficiencia y asma.

Las enfermedades que se han identificado en los restos de esta cultura prehispánica, principalmente eran traumas como las fracturas y lesiones, padecimientos degenerativos como anemia, leucemia, deficiencia de vitamina C y D, malformaciones, tumores; e infecciones como lepra, trepanomatosis, brucelosis, tuberculosis, varicela, rubeola e infecciones causadas por hongos como actinomicosis aspergilosis e histoplasmosis. También hay indicios de haber padecido artritis degenerativa y osteoporosis.

Fuente:

Treviño, Carlos Viesca. 2007. Historia de la Medicina en México. Departamento de Historia y Filosofía de la Medicina, Facultad de Medicina, México: Universidad Nacional Autónoma de México, pp. 35 – 49.


Medicina en el antiguo Egipto…

Medicina en el antiguo Egipto…

Paleopatología en las momias egipcias…

El padre de la paleopatología, Marc Armand Ruffer, realizó exámenes en 500 cráneos encontrados en una tumba de Gizeh y gracias a los resultados destacó que los miembros de las altas clases sociales egipcias tuvieron caries dentales al igual que el hombre moderno.

Hacia 1910, este paleopatólogo divulgó el resultado de los estudios que realizó en los riñones de dos momias de la vigésima dinastía que datan de entre 1250 a 1085 a.C., en los que encontró los huevos calcificados de un trematodo intestinal llamado Schistosoma Haematobium que aún a inicios del siglo XX afectaba al 40% de los habitantes del Nilo. Este parásito es parecido a una sanguijuela, se desarrolla en los canales de irrigación y penetra en el cuerpo humano a través de la piel, luego se aloja en las venas mesentéricas o vesicales y puede generar disuria, poliuria, polaquiuria, hematuria o una infección bacteriana que provoca uropatía obstructiva y probablemente cáncer de vejiga.

Percival Pott había descrito con anterioridad en 1779 los signos de un tipo de tuberculosis que lleva su apellido, pero fue Grafton Elliot Smith quién muchos años después, en excavaciones realizadas en Assuán, desenterró una estatuilla de arcilla y varios esqueletos que mostraban la enfermedad de Pott en la columna vertebral.

Ruffer y Smith, descubrieron las típicas lesiones de viruela en momias casi al mismo tiempo. Otras enfermedades también descubiertas en momias egipcias gracias a la paleopatología son: antracosis, neumonía y pleuresía.

 

Faraones, embalsamamiento y medicina…

A pesar de que la escritura egipcia en papiros surgió alrededor del 3000 a.C., fue hasta el siglo XX que se descubrieron y descifraron los 7 papiros de la medicina egipcia. El más antiguo, el de Kahun, data de 1900 a.C. y trata sobre la medicina veterinaria y las enfermedades de la mujer. El papiro Edwin Smith data del 1550 a.C. y se ocupa de los problemas quirúrgicos de la cabeza a la mitad del pecho. Del mismo año data el papiro Georg Ebers, siendo el más extenso cuya información es sobre la terapéutica, entre la que destacan recetas, técnicas manuales, encantamientos y hechizos.

El papiro Hearst contiene 260 recetas mientras que el papiro “pequeño” de Berlín trata sobre pediatría, ambos datan del 1600 a.C.; el papiro “grande” de Berlín contiene una prueba de embarazo y 204 recetas, el de Londres incluye 61 recetas, mayormente mágicas y por último, el de Chester Beatty es sobre el tratamiento de las enfermedades del ano, estos últimos tres papiros datan del 1300 a.C.

Para los egipcios el cuerpo humano era un sistema depurativo que recibía alimentos y “algo” existente en el aire, que si eran de mala calidad o naturaleza, el cuerpo enfermaba y la totalidad de su creación se componía por los cuatro elementos naturales: tierra, agua, fuego y aire.

El corazón era de tanta importancia que lo conservaban en el cuerpo embalsamado, la nariz también era de suma importancia por recibir el aire que era fundamental para la vida, esta razón dio pie a la costumbre de romper las narices de las estatuas y relieves con cabeza humana para destruir el poder demoniaco que podría habitarlas.

Al morir, se embalsamaba el cadáver como un acto ritual cuyo objetivo era el de prepararlo para la otra vida. Se debía mutilar lo menos posible por lo que solo se realizaba un corte en el costado izquierdo para extraer los órganos abdominales y los pulmones, mientras que, la masa encefálica se extraía por las fosas nasales con ayuda de un instrumento en forma de gancho.

 

  

Fuente:

 

Cortés R. J. G. R., Pérez G. D., et al. 2007. Historia Antigua de la Medicina.

Estudios en momias egipcias, El Reino de los Faraones.

Puebla, Puebla: Benemérita Universidad de Puebla,

Universidad Nacional Autónoma de México. pp. 52, 53, 71 – 76.