Se trata del crecimiento anormal de las células de la piel y puede dar lugar a distintas variedades de cáncer, desde las menos agresivas hasta otras que pueden llegar a ser mortales.
Es posible detectarlo de manera no invasiva mediante dermatoscopia o microscopia de reflectancia con focal, que consiste en utilizar un microscopio láser para ver las células y la arquitectura del tejido sin tener que cortar o dejar cicatrices innecesarias al paciente.
El tener muchos lunares no significa tener una enfermedad, pero si puede llegar a ser un factor asociado a desarrollar cáncer de piel entre otros factores como las quemaduras solares que se desarrollan durante la infancia y la adolescencia ante la exposición solar aguda, siendo esta exposición entre el 40 a 70% del daño producido durante toda su vida, y tener antecedentes de familiares con cáncer de piel o de páncreas.
Se recomienda evitar la exposición solar entre las 11:00 y las 16:00 horas, cubrirse con manga larga, el uso de bloqueador solar y aplicarlo de 15 a 30 minutos antes de la exposición a exteriores, aunque el día esté nublado, y deberá retocarse cada 3 a 4 horas o después de realizar alguna actividad deportiva.
Es importante monitorear tu cuerpo y asistir con el especialista en caso de que detectes alguna mancha que cambia de tamaño, forma o color.
Con información de la Clínica de Oncodermatología de la Facultad de Medicina, UNAM, recuperado en http://oncodermatologia.facmed.unam.mx/
El Programa de Donación de Cuerpos de la Facultad de Medicina, surge ante la necesidad de remodelar las instalaciones del anfiteatro y las salas de disección, por lo que el Dr. Diego Pineda Martínez, jefe del entonces Departamento de Anfiteatro. Viajó con un equipo de arquitectos a las mejores universidades de Estados Unidos, donde además de ver las instalaciones de vanguardia, conocieron los proyectos de investigación y docencia con los que contaban, gracias a la Donación de Cuerpos, tomándose en cuenta para su implementación en la Facultad.
Son muchos los beneficios que se pueden rescatar del Programa de Donación de Cuerpos, hablando de Bioética, se respeta mucho la autonomía de una persona en vida para cumplir su voluntad cuando llega su fallecimiento; esto le permite a la docencia desarrollar múltiples cursos tanto de pregrado como de posgrado para evitar los errores médicos que ocupan la tercera causa de muerte a nivel mundial por falta de práctica.
Con respecto a la investigación, favorece a la población mexicana, ya que prótesis, aparatos o tratamientos que vienen del extranjero tienen como referencia otras poblaciones con características distintas y muchos de los cuerpos que llegan al anfiteatro cuando no son donados, carecen de un historial clínico. Contar con el historial clínico de una persona que decide donar su cuerpo permite tener información previa sobre enfermedades y padecimientos para realizar investigaciones con sustentos más sólidos.
La persona que decide donar su cuerpo puede decidir exactamente el propósito al que será encaminado, si es para investigación o docencia, si es para la práctica de pregrado o posgrado, y la voluntad será dignamente respetada.
Programa de Donación de Cuerpos pdc@unam.mx Teléfonos: 5623 2269 / 5623 2412
Departamento de Innovación en Material Biológico Av. Universidad No.3000, Circuito Interior, 4to piso del Edificio B, Ciudad Universitaria, Coyoacan 04510. Ciudad Universitaria Coyoacan 04510. Ciudad Universitaria
El síndrome de Burnout, o también conocido como síndrome de desgaste ocupacional, se asocia a ciertas condiciones de trabajo que se reflejan con desgaste, incapacidad para continuar con un trabajo o molestias sobre éste. Generalmente se presenta tras un periodo de estrés crónico en el contexto laboral, el personal afectado sufre síntomas como aislamiento, agotamiento, dificultad para concentrarse, desmotivación y fallas en sus funciones laborales.
Las causas pueden ser falta de recompensa y reconocimiento, falta de gusto, carga excesiva de trabajo, y pueden generar como consecuencia que la persona afectada esté de mal humor, dificultad para despertar o cumplir con sus funciones.
Este síndrome se presenta principalmente entre la población que se dedica al área de la salud, sin embargo, puede presentarse en cualquier área laboral y a cualquier edad, aunque el mayor reporte de incidencia que se tiene es en un rango de los 25 y a los 45 años. En muchas ocasiones, puede asociarse al desarrollo de otras enfermedades, sobre todo mentales, como la depresión y algunos síntomas físicos como frecuentes dolores de cabeza o dolores que puedan ser parte de otras enfermedades crónicas.
La Organización Mundial de la Salud le dio visibilidad clínica a este síndrome a partir del 28 de mayo del 2019, lo que abre una mayor oportunidad para investigarlo, diagnosticarlo y atenderlo; a su vez, hacer reflexionar a las empresas y exhortarlas a preocuparse más por la productividad sana de sus empleados, el clima laboral, su salud y hacerse responsables por los detonadores de estrés a los que ellos se pueden enfrentar.
El problema no solo resulta interno, se trata de un problema que va al fondo del modelo económico que actualmente se tiene adoptado, con la apuesta por la alta productividad en un mundo globalizado; en nuestro país, por ejemplo, existe una gran indefinición e incongruencia por las verdaderas funciones de cada puesto de trabajo y muchas veces los servidores públicos realizan cinco actividades más de las que están destinadas.
Se dice que para el 2030, la primera causa de incapacidad en el mundo será la depresión, seguida de enfermedades cardiovasculares y el VIH, considerando al estrés como la gran epidemia de nuestros tiempos.
Con información del Dr. José Javier Mendoza Velásquez, médico especialista en Psiquiatría, coordinador de Investigación del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM.
El 31 de mayo de cada año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra el Día Mundial Sin Tabaco. La idea es concientizar sobre los efectos nocivos y letales del consumo de tabaco y la exposición al humo.1
El tabaquismo es una enfermedad, producto de una conducta adictiva y una intoxicación recurrente. Más que un problema de salud mental, es un problema de salud pública, global y de mucha gravedad. Gracias al consumo de tabaco, ocurren mas de 6 millones de muertes en el mundo, cifra que tiene importancia debido a que es una causa de muerte prevenible. 1-2
Aproximadamente 480 mil personas mueren por fumar o estar expuestas al humo de tabaco en los Estados Unidos de Norteamérica y la esperanza de vida de un fumador es aproximadamente 10 años mas corta. Más de 150 mil adultos de 35 años o más, tienen enfermedades cardiovasculares relacionadas con el hábito del tabaco. Esto es importante ya que las enfermedades cardiovasculares son una de las tres principales causas de enfermedad a nivel global y el tabaco es el responsable del 20 % de éstas.
Existen más de 1,000 millones de consumidores de tabaco en el mundo y la prevalencia es muy variable de acuerdo con el sexo y la cultura. 25% de hombres y 5% de mujeres de 195 países del mundo fuman una vez al día. 2
Hay fumadores en todos los países de cualquier nivel de ingresos, pero el 80% de fumadores vive en países de ingresos medios y bajos. El consumo de tabaco en países como los Estados Unidos de Norteamérica comenzó a disminuir en 1960, tras darse a conocer las consecuencias que tiene para la salud el fumar y que se lanzaran las políticas de control sobre el tabaco.
La mayoría de los fumadores usa tabaco combustible, 76% fuma diariamente y 24% menos de una vez al día. En la actualidad, cada vez más fumadores utilizan más de un producto de tabaco, incluyendo cigarros puros, cigarrillos, pipas, pipas de agua y tabaco sin humo. El incremento del uso del cigarro electrónico actualmente es de particular importancia ya que, aunque surgió con el objetivo de reducir los riesgos para la salud tras disminuir el humo, gran parte de los riesgos prevalecen ya que también la nicotina es causa de actividad simpática que puede traducirse en enfermedad cardiovascular. 1-2
Prevención y tratamiento del consumo de tabaco.
El tratamiento para disminuir el consumo de tabaco debe ser una prioridad en los médicos que atiendan a pacientes con enfermedades cardiovasculares. Esta prioridad debe ser tan alta como el tratamiento de todos los factores de riesgo cardiovascular, como la hipertensión o la hiperlipemia y que se han relacionado con la incidencia de enfermedades mentales como la enfermedad de Alzheimer.
En orden a la practica médica y las intervenciones necesarias, es importante insistir en la necesidad de dejar de fumar. Los fumadores usualmente tienen interés en dejar de fumar, sin embargo, gran cantidad de tratamientos no han demostrado éxito o no están basados en evidencia clara.
Es importante que los médicos que atienden a pacientes en primer contacto, y en atención a las enfermedades cardiovasculares, puedan ayudar a disminuir el consumo de tabaco más allá de solo dar orientación o sugerir dejar de fumar, sino tomar parte activa de esto a través de intervenciones definidas para esto. El consejo médico solo puede aumentar la posibilidad de desarrollar el deseo de dejar de fumar, por lo que debe ser constante en la práctica médica. Sin embargo, no es suficiente. Las intervenciones psicosociales aumentan la abstinencia hasta 12 meses y la orientación a los no fumadores para adoptar medidas de seguridad en espacios comunes son importantes. Al tener contacto con patologías cardiovasculares de reciente inicio, se convierte en una oportunidad tanto para el fumador como los no fumadores para proporcionar un momento de orientación que debe repetirse en cada consulta orientada a la patología cardiovascular y, en caso necesario y de contar con la aprobación del paciente, canalizar a un tratamiento específico que usualmente incluye tratamiento farmacológico y psicoterapéutico. 2
Nuevas formas de consumo de tabaco.
Cuando pensamos en el consumo de tabaco, usualmente pensamos en cigarros. Pero en orden al consumo de tabaco existen múltiples dispositivos antiguos y modernos como las pipas, los cigarros combustibles, los cigarros electrónicos, las pipas de agua, entre otros.
El reciente interés comercial en los cigarros electrónicos y su extenso uso han levantado una serie de opiniones diversa. Hay una gran división de parte de la comunidad científica y en general esta permanece escéptica ante su uso. Es necesario señalar que el hábito de fumar no solo daña a través del humo, sino a través de la administración de nicotina en forma crónica. Es por esto que aun en contra de las grandes industrias de tabaco, el 31 de mayo se celebra un día sin tabaco, no como ellos proponían, un día sin humo.
En los Estados Unidos de Norteamérica se realizó un estudio haciendo la comparación entre hábitos de consumo de productos de tabaco, prediciendo los años de vida ganados ante el dejar de fumar contra el usar cigarros electrónicos calculado desde la actualidad hasta el año 2070.
Las cifras base apuntan a una disminución en el consumo del 10% al usar cigarros electrónicos, sin embargo, el 2% de la población que inicia utilizando estos productos, inicia a fumar posteriormente cigarros combustibles dejando en duda los beneficios del “vaping” (consumir cigarros electrónicos con base agua) para la salud. Una gran cantidad de consumidores de cigarros electrónicos que iniciaron el “vaping” continúan fumando cigarros combustibles.
Si comparamos el dejar de fumar contra el uso de cigarros electrónico, la población gana casi 3.3 millones de años al dejar de fumar hacia 2070, sin embargo, la población que deja de fumar para iniciar el “vaping” pierde el 10% del beneficio del dejar de fumar ganando solo 2.4 millones de años de vida. Esto sin contemplar el hecho de que no inicie el consumo de tabaco nuevamente a través del “vaping”, en la que “solamente” se ganarían 580 000 años.
Esta proyección es útil para entender la importancia global del tabaquismo. El beneficio de la salud dado al cigarro electrónico para aumentar el abandono del hábito de dejar de fumar es incuestionable, pero lo verdaderamente necesario es dejar de fumar. “Vaping” no es suficiente y los mensajes y las políticas de salud deben orientarse a la suspensión del consumo de productos de tabaco y en general a todos los productos de nicotina. 3
El futuro del tabaquismo.
Las predicciones sobre el consumo de tabaco aún son inciertas. Pero algo es innegable, la epidemia de tabaquismo con sus consecuencias para la salud y la economía global seguirán aumentando en todos los países y en ambos géneros.
La industria productora de tabaco ha sentado sus raíces ahora en sitios con menores regulaciones como nuestro país y países en desarrollo y los pronósticos de sus consecuencias no son alentadores. De continuar la tendencia actual, hacia el 2030-2040 el número de consumidores de tabaco llegara a 2 mil millones. Los avances en el tratamiento del cáncer han generado un sentido de seguridad ficticio en los consumidores, pero la carga compartida en muerte y discapacidad aumentara entre 2020 y 2030 a 9%. El 85% de los fumadores se localizará en países pobres y las brechas en estos países para resolver los problemas de salud dependientes de tabaco, seguirán incrementando.4
Los avances en las políticas públicas han limitado la exposición pasiva al humo de tabaco, sin embargo, la exposición domiciliaria en general prevalece. El futuro es incierto pues el modelo más perfecto de adicción esta en el tabaco. El tratamiento para abandonar el consumo de tabaco es complejo y costoso, pero la carga global de los problemas asociados al consumo es mucho mayor.
Kalkhoran, S., Benowitz, N. L., & Rigotti, N. A. (2018). Prevention and Treatment of Tobacco Use: JACC Health Promotion Series. Journal of the American College of Cardiology, 72(9), 1030–1045. https://doi.org/10.1016/j.jacc.2018.06.036
Warner, K. E., & Mendez, D. (2019). E-cigarettes: Comparing the Possible Risks of Increasing Smoking Initiation with the Potential Benefits of Increasing Smoking Cessation. Nicotine & Tobacco Research : Official Journal of the Society for Research on Nicotine and Tobacco, 21(1), 41–47. https://doi.org/10.1093/ntr/nty062
Anteriormente se decía que no era bueno consumir pescados y mariscos en los meses calurosos de mayo a agosto, mismos que carecían de la letra “r” en su nombre, pero las circunstancias han cambiado, ya que las compañías pesqueras ahora pueden mantener la cadena de frío que estos alimentos necesitan para su conservación adecuada y no se descompongan tan rápido, deben mantenerse fríos desde el momento en que se adquieren hasta que se cocinan, por lo que ahora es más difícil que enfermemos por esta causa.
Estos alimentos son ricos en proteínas de alta calidad, omega 3, fósforo, calcio y grasa no tan saturada que favorece la digestión, no se recomienda su consumo de manera frita o empanizada, ya que estos preparados le añaden gasas que no son las más adecuadas para una dieta.
Las temporadas en las que no se deben consumir pescados y mariscos en cuando es tiempo de marea roja, veda o se están reproduciendo, se deben esperar 30 días después de esto, y también debe limitarse su sobreexplotación cuando la población de ciertas especies no es suficiente.
Con información de La Dra. Elvira Sandoval Bosch, Nutriologa Clínica, Académica y Profesora del Departamento de Sanidad Pública de la Facultad de Medicina, UNAM.